jueves, 12 de septiembre de 2013

La Formación Continua

El objetivo de la Formación Profesional continua es el de "mantener el empleo y la empleabilidad de la población ocupada, así como su promoción mediante la mejora, recualificación o puesta al día de sus competencias profesionales, de lo cual se debe derivar la mejor competitividad de las empresas", y siendo sus funciones las de:
  1. Adaptación permanente de la evolución de las profesiones y del contenido de los puestos de trabajo y, por tanto, de mejora de las competencias y cualificaciones.

  2. Promoción social que permita a muchos trabajadores evitar el estancamiento en su cualificación profesional y mejorar su situación laboral.

  3. Preventiva para anticipar las posibles consecuencias negativas de la realización del mercado interior.

La Formación Continua es un derecho permanente de los trabajadores que constituye un elemento para favorecer la igualdad de oportunidades y la promoción personal y profesional ante la continua evolución de los nuevos sistemas de producción.

Existen estudios de la Unión Europea que demuestran que la cualificación profesional mediante la formación permanente es motivo de creación de empleo, del mantenimiento de los existentes y expansión empresarial mediante la atracción de inversiones de capital.

La Formación Continua es, por lo tanto, una actividad en la que se deben involucrar todos los estamentos de la empresa y, pese a que la visión tradicional es la de que existen intereses opuestos, se debe tratar de facilitar la participación de un número muy amplio de agentes en su organización y gestión.